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Nanorrelatos

06.06.2013 15:48

Los nanorrelatos son historias en su mínima expresión. Por lo general, un nanorrelato consta de una única línea de texto, aparte de la del título, o bien de varias líneas cortas. En este último caso suelen corresponderse con las citas de un diálogo breve. Por término medio, un nanorrelato está redactado con unas 10 palabras (incluidas las del título). 

Éste es un ejemplo de nanorrelato: 
 

  Le robé el corazón 
—Ya puede empezar el trasplante, doctor.

Autor: Alejandro Alcalde Vicente


Éstos son dos ejemplos más: 
 

  Cuento de terror 
Cuando quisimos darnos cuenta, todos éramos funcionarios.

Autor: Oscar Sipán Sanz 

In extremis 

Logré besarla. Total, era el fin del mundo.


Autor: Ignacio Cañas Hernández

 

Dado el escaso número de palabras con el que el nanorrelato debe ser escrito, al lector sólo se le muestra, por lo general, un instante o retazo la historia a la que se refiere (por ejemplo, el desenlace), dejando el resto del relato a su imaginación o a su capacidad de deducción. Debido también al límite en la longitud, el título se suele aprovechar para narrar parte de la historia en él.

 

Otros Ejemplos:

 

La tienda 

Entra andando, sale volando.


David García 


Stop 

Cuando frené, ya estaba en medio de las Cruzadas.


Ginés Mulero 


Su billete 

Tenía frío, pero el revisor aún le abrazaba.


Juan de la Rica 


Con cartuchos de tinta... 

Venció a los de pólvora.


Beatriz Egea 


El sicario 

Cacahuetes más grandes. Así maté al presidente.


Ignacio Cañas 


¿Alpinista o espeleólogo? 

Confuso, en el centro de la Tierra.


Juan José Hidalgo 


Juguetes 

A dormir, que ya amanece. Recoged los cadáveres, niños.


Sonia Vergara 


Salmón loco 

Quiero nadar a corriente, sólo por una vez.


Margarita Lizcano 


Minotauro 

Se perdió en su propio laberinto. Pero se encontró a sí mismo.


Erika Roostna Javornik 


Escondite 

A nadie se le ocurrió buscarme en la caja.


Luisa Fernanda Rodríguez Lara 
 

 

 

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